Durante la temporada de medida de radón se dispara la demanda de instrumentos de medida. Fredrik Lindén y sus compañeros del departamento de producción de instrumentos de medida de radón de Radonova esperan un incremento significativo de la demanda.
«Para la fabricación de los instrumentos de medida activa del radón recurrimos a la tecnología más puntera. Todos nuestros instrumentos se fabrican a mano en nuestros talleres de Uppsala (Suecia) y se precisa una amplia experiencia en la materia para lograr los mejores resultados. Nuestro trabajo se asemeja bastante al de un artesano, ya que cumplimos unos requisitos de calidad extremadamente rigurosos para que cada uno de los instrumentos que se producen en nuestros talleres proporcione el máximo nivel de precisión y fiabilidad. Sobre todo, teniendo en cuenta que en algunos casos los instrumentos se someten a condiciones muy duras», explica Fredrik Lindén.
Cómo gestionamos la demanda
«Para satisfacer la demanda del mercado, últimamente nos hemos centrado especialmente en la producción de nuevas unidades de MARKUS 10, un modelo muy solicitado, e intentamos mantener un ritmo que nos permita disponer permanentemente de existencias para garantizar plazos de entrega rápidos», prosigue Fredrik Lindén.
Instrumentos de radón: robustez y la facilidad de uso son esenciales
«Somos conscientes de que el éxito de nuestros instrumentos se debe a su robustez, su facilidad de uso, su fiabilidad y su precisión. El MARKUS 10 es un buen ejemplo. Lo que los clientes esperan de nuestros talleres de producción es que les proporcionen un instrumento de calidad que les facilite el desarrollo de su actividad profesional y, al fin y al cabo, les permita proporcionar a sus propios clientes una medida de radón fiable. Nuestro trabajo consiste en garantizar este resultado. Por ello, sometemos sistemáticamente todos los componentes de nuestros instrumentos a pruebas que toman como referencia los requisitos de calidad más estrictos», concluye Fredrik Lindén.
Markus 10 en pocas palabras
Cuanto mayor sea la concentración de radón en el suelo, mayor será el riesgo de que el radón pueda llegar a suponer un problema. MARKUS 10 es un instrumento concebido para medir el radón directamente en el suelo. Se trata de un instrumento portátil, alimentado por una batería, que puede medir altas concentraciones de radón. El principio de funcionamiento es el siguiente: se coloca una sonda en el suelo que se conecta con el dispositivo a través de un sistema de bayoneta estanco. Al presionar «START», el instrumento bombea el aire contenido en el suelo. El instrumento, capaz de detectar las partículas resultantes de la desintegración del radón (polonio 218), muestra al cabo de 12 minutos un valor fiable de los niveles de radón.