El radón en viviendas cobra especial importancia en las operaciones del mercado inmobiliario. Es más importante que nunca tener un registro claro de todas las cuestiones que podrían afectar a sus posibilidades de cierre de la operación de compra-venta.
Una de las cosas más fáciles de hacer es llevar un registro de los niveles de radón.
Tanto los vendedores como los compradores deben asegurarse de que la medida del radón figure en la lista de comprobación al comprar una casa.
A menos que exista una medida acreditada del radón que no sea muy antigua y muestre un nivel de radón inferior a 300 becquerelios por metro cúbico (Bq/m3), debe realizarse una medida.
Si se han llevado a cabo reformas o remodelaciones desde la última medida del radón, también debe realizarse una nueva medida de acuerdo con el CTE, ya que esto puede haber afectado al nivel de radón.
El radón en viviendas: el interés del propietario
Para un propietario, es importante que el nivel de radón en viviendas sea lo más bajo posible.
Supone una ventaja para los vendedores poder hacer referencia a una medida actual del radón que muestre un nivel de radón inferior al valor límite de 300 becquerelios por metro cúbico (Bq/m3 ).
La mayoría de las casas no tienen niveles de radón por encima de ese valor, y si se pueden mostrar documentos claros que lo demuestren, por supuesto no supone ninguna desventaja en el proceso de venta, afirma Karl Nilsson, director general de Radonova Laboratories.
Medida a corto plazo del radón en viviendas
Si el tiempo lo permite, se recomienda realizar una medida a largo plazo que proporcione una media anual.
Dado que una medida de este tipo debe durar al menos dos meses este tipo de análisis no siempre es posible en una casa concreta. La alternativa en estos casos es realizar una medida a corto plazo.
Para ello sólo se recomienda un periodo de medida de 48 horas y puede llevarse a cabo durante todo el año.
El radón en los apartamentos y el Código Técnico de la Edificación
En España la medida del radón en los apartamentos y edificios esta regulada por el Código Técnico de la Edificación (CTE).
Es muy importante recordar que el nivel de referencia que establece el CTE son 300 Bq/m3 de concentración anual promedio en el aire en el interior del edificio.
El CTE no establece un nivel de referencia de concentración de radón en el suelo. Por otro lado, los órdenes de magnitud de la concentración de radón en el interior de un suelo y en el interior de un edificio son absolutamente diferentes.
Es igualmente muy importante el indicar que, independientemente de la clasificación del municipio donde se encuentre el edifico (zona I o zona II), cualquier edificio en cualquier lugar del territorio puede tener un nivel de radón elevado.
La clasificación del municipio no sirve para determinar el nivel de concentración anual promedio del aire en el interior del edificio.
Por ese motivo, el CTE obliga a realizar dicha medida una vez terminado el edificio.
Motivos para medir el radón
En todo el mundo, unas 230000 personas padecen cáncer de pulmón causado por el radón (en España, unas 1500), y sin embargo se conocen relativamente poco los riesgos para la salud asociados a la exposición a largo plazo a niveles elevados de radón.
En España, desde 2022 está en vigor el RD 1029/2022 que regula la exposición a radón en centros de trabajo. Puedes encontrar más información en este enlace.
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Lee más información sobre el radón en el trabajo y como medirlo en la web de Radonova en español.
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No olvides que la única manera de conocer tu nivel de radón es mediante una medida.
Y recuerda usar siempre un servicio de medida de radón acreditado ISO 17025.
